Buscar este blog

29 feb 2020

Melina


Por: Ernesto Pino
Crónicas musicales… crónicas sobre canciones populares muy reconocidas en el mundo.

Dedico esta crónica a todos aquellos que en forma pasiva no han tenido una posición clara y sensible en defensa de la real democracia, como un instrumento político verdadero que garantice una mejor vida a nuestra descendencia.

El Cantante español Camilo Sesto, nunca se imagino que la actriz de la película “Nunca en domingo”, que vio con admiración en un teatro de su natal Alcoy, municipio de la provincia de Alicante; estaría años mas tarde ligada a su vida.

La génesis de la balada iberoamericana, indudablemente  fue muy compleja y tuvo como antecedentes de fusión musical la balada norteamericana, el rock suave de Elvis Presley y por supuesto también, la contundente herencia del ritmo eterno del bolero con sus versiones especialmente mejicanas, argentinas, cubanas, puertorriqueñas. En Méjico, por su relación de país vecino con USA, se dio más fácilmente este origen de la balada con artistas como Cesar Costa y Enrique Guzmán. Pero indudablemente, tomó mas fuerza el movimiento baladista con la presencia del gran cantante español Raphael que deslumbró con las canciones del compositor Manuel Alejandro (“Yo soy aquel”, “Cuando tu no estas”); mientras desde Italia y Francia hacían presencia Doménico Modugno, Adamo, Nicola Di Bari y Charles Aznavour.  También, el festival de Eurovision le dio un impulso definitivo a esta música con las versiones del mismo, que ganaron las cantantes Massiel (“La la la”) y Gigliola Cinquetti (“No tengo edad”, pero mas conocida por “Dios como te amo”). Estos artistas fueron pioneros de un gran movimiento que apareció con todo su furor en los años 70 del siglo pasado, en las voces de Roberto Carlos, Sandro, Leo dan, Leonardo Favio, Piero, etc.

La balada como género musical copó los espacios melódicos de Iberoamérica durante más de 50 años y con un énfasis en su armonía mucho más individual que social y en un esquema melodramático y lento de canciones que le cantan al amor. Por esta razón la balada y la canción social son diferentes y es precisamente ese contraste lo que hace valioso que uno de los grandes baladistas de todas las épocas, como el cantante español Camilo Sesto (Camilo Blanes), de manera casi imposible, impensada y muy audaz, construyera una canción como Melina que indiscutiblemente es una balada extraña y diferente como homenaje a la actriz, cantante y luchadora social de Grecia, Melina Mercouri, quien en los años 70 se robó todos los titulares de la prensa mundial.

En esa época, la canción fue un éxito con iguales honores que tuvieron otras baladas de Camilo Sesto, como  Todo por nada”, “Vivir así es morir de amor”, “Algo de mi”, “Mi mundo tu” o “Fresa salvaje” (con ese nombre un fanático peruano bautizó a su hija).

Ciertamente, Camilo Sesto fue una figura muy controvertida en el mundillo artístico musical desde los años 70 hasta su fallecimiento en septiembre del 2019; hasta el punto que muchos de sus críticos mas ácidos lo consideraban andrógino, trivial y en algunos corrillos lo tildaban de no tomar partido entre los Republicanos y la falange española del general Franco, que enfrentaron la guerra civil española entre 1936 y 1939 y que históricamente dividió al país en dos bandos. Casi en su totalidad la mayoría de los artistas de la cultura se alinearon con los demócratas republicanos.

Pero lo que realmente nunca tuvo un reparo fue el reconocimiento de que Camilo tenía una voz extraordinaria y además poseía un diferencial con muchos grandes artistas contemporáneos: era el autor de sus canciones.

Aparentemente frívolo por las características livianas de los textos de sus baladas, le dio mucha fuerza al genero baladista siguiendo una línea de melodías sencillas muy inspiradas en las canciones de los Beatles, sus mayores ídolos a quienes interpretó en el inicio de su carrera artística.

Se dice también que el estilo novedoso de sus canciones y la aceptación de los adolescentes de Iberoamérica, se forjó con el apoyo considerable que le dio su relación íntima con la actriz italiana Lucia Bose (madre del cantante Miguel Bose), ya muy conocida por su talento y por su relación sentimental con el gran torero Luis Miguel Dominguín. Lucia se convirtió en su hada madrina y le ordenó con gran dedicación una preparación intelectual de la poesía y la cultura de las artes. Lucia asimismo le escribió la letra de su gran éxito “Amor amar”. Además de Los Beatles, el camino de su inspiración se trazó con el conocimiento del poeta Chileno Pablo Neruda a quien recitaba en privado, del violonchelista Pablo Casals y del pintor Pablo Picasso. También fue providencial en su carrera artística el cantante español Juan Pardo, quien fue productor de varios de sus trabajos discográficos.

Camilo Sesto realmente conquistó el mundo artístico y a los críticos mas difíciles de la farándula y de la academia cultural de España en el año 1975 cuando interpretó con mucha temeridad la opera de rock Jesucristo Superstar que ya había sido un éxito mundial en el teatro musical de Broadway en Nueva York. Es una obra maravillosa que marcó un punto de inflexión en la historia musical de España: “Su lenguaje roquero, la falta de divinidad del personaje de Jesucristo (interpretado por Camilo), el movimiento hippie marcado en el vestuario, lo han hecho trascender...” (Ver Jesucristo Superstar. Opera rock. La pasión de Camilo Sesto de Martha García Sarabia). Recomendable escuchar Getsemaní interpretado por Camilo.

Pero también despejó las dudas sobre su motivación política cuando en el mismo año escribió la canción Melina, en honor a la actriz griega Melina Mercouri, de quien era un fervoroso admirador. Después de una presentación en Chile, gobernada entonces por la dictadura de Pinochet, muchos de sus censores que debatían el conflicto mundial entre capitalismo y comunismo en plena guerra fría, le atacaron con un mote que le dolió en el alma: Camilochet. Pero su aceptación por las buenas causas le llego mas tarde, después de haber creado la canción Melina: en un concierto en Méjico, y en plena función cuando Camilo cantaba “si se calla el cantor”, repentinamente,  se subió al escenario un hombre de sombrero, vestido con un traje típico y el publico enmudeció: era Horacio Guaraní, el autor de esa bella canción, quien lo abrazó y luego cantaron a dúo.

“Melina” surge justo cuando la actriz regresa a Grecia, su país natal, después de haber sido exiliada en Francia durante la Dictadura de Los Coroneles (1967 y 1974), ya que la consideraban una opositora transcendental. Aunque fue despojada de su nacionalidad, Melina siguió luchando por sus ideales políticos hasta que logró regresar a Grecia y convertirse en Ministra de Cultura. En ese papel, luchó por la recuperación de una colección escultórica del Partenón, que el gobierno ingles le había robado a principios del siglo XIX. En Francia siempre dijo “nací en Grecia y en Grecia voy a morir” y refiriéndose al coronel Georgios Papadopoulos, Jefe de de  la dictadura, lo descalificó con la fuerza de su popularidad y su ímpetu de activista política: “nació siendo fascista y morirá siendo fascista”.

Canción sencilla, emotiva y profunda:

“….haz vuelto Melina/alza tus manos hacia Dios/que el escuche tu voz…
“…tu vida y tu razón es tu país/donde el mar se hizo gris/donde el llanto ahora es canto...”

 El nombre artístico de Camilo Sesto, realmente se dio porque él era el sesto Camilo de su familia mas cercana; pero también se prestó a una interpretación que Camilo a pesar de su gran amor por Méjico, detestaba profundamente: Camilo Sesto, quien en la cedula aparecía como Camilo Blanes fue sujeto de un chiste que se metió en las faldas de la farándula hispana. A Luis Echeverría, expresidente de Méjico, famoso por haber sido Jefe de seguridad en la triste matanza de estudiantes de Tlatelolco en 1.968 y ser cuñado del político Rubén Zuno Arce, quien apoyaba al capo de la mafia Miguel Ángel Félix Gallardo; a su regreso de un viaje a Europa siendo presidente, le preguntaron si había visitado al Papa Pablo VI, y el contestó que no, pero que si había conocido a su hijo Camilo Sesto.

Al final, tomamos una frase suya que aparece en su biografía y que resalta las condiciones especiales de sus canciones, incluida por supuesto Melina: “Mis canciones tienen que tener carne, sentimiento, fuerza. Ser una explosión, un atrevimiento, un reto” (Camilo, Editorial Plaza y Janes, 1.985).

Melina es una perfecta invocación que cantamos mucho tiempo sin saber quien era y sin saber el porque se había ganado ese diamante musical como homenaje a una vida dedicada al arte y a servir a su gente.


Postdata: Activa el link de la canción arriba y canta con la letra.

Melina

Eres fuego de amor
luz del sol
volcán y tierra
por donde pasas
dejas huella

Mujer
tú naciste para querer
has luchado por volver
a tu tierra y con tu gente

Has vuelto
Melina
alza tus manos hacia Dios
que el escuche tu voz
Laralala lala


Has vuelto
Melina
tus ojos reflejan el dolor
y tu alma el amor
Laralala lala

La huella de tu canto
echó raíces
Melina
y vuelven a reír
tus ojos grises
Melina
Ah Laralala lalalay laralala

Tu vida y tu razón
es tu país
donde el mar se hizo gris
donde el llanto
ahora es canto

Has vuelto
Melina
alza tus manos hacia Dios
que el escuche tu voz
Laralala lala

Has vuelto
Melina
tus ojos reflejan el dolor
y tu alma el amor
Laralala lala

La huella de tu canto
echó raíces
Melina
y vuelven a reír
tus ojos grises
Melina
Ah Laralala lalalay laralala